María Fernanda Carvallo, Gestor Comunitario de Mexico D.F.
El mapeo comunitario acerca a las personas a su entorno para conocer su historia, necesidades y las propias narrativas de la comunidad para incidir en su desarrollo. En este sentido, el departamento de Ciencias del Comportamiento y del Desarrollo de la Universidad de las Américas en la Ciudad de México, desarrolló un mapeo comunitario para identificar la incidencia del entorno en la comunidad de Nezahualcóyotl, basado en la teoría ecológica de Urie Bronfenbrenner, quien sustenta que los sistemas y el ambiente local influyen el cambio de conducta en el sujeto y esto a su vez en el cambio de desarrollo en el entorno. Este estudio, realizado por Suzette Aglot, describió el proceso relacional entre el sujeto y la comunidad de San Agustín Atlapulco, y definió los factores que hacen vulnerable a esta comunidad. Así mismo, de acuerdo a la autora, una de las herramientas del análisis de la salud comunitaria es el proceso de mapeo ecológico social. Este proceso intenta representar las interrelaciones entre condiciones y eventos que tienen lugar en el ambiente inmediato del individuo (v.gr., la casa, la familia, y los amigos), así como en ambientes más amplios y distantes (v.gr., el trabajo, la escuela, los hospitales y la distribución de bienes y servicios del que toma parte).
Para llevar a cabo el estudio, se realizó una etnografía por medio de la identificación del contexto geográfico y de fuentes de información y observación (v.gr., miembros de la comunidad, visitas a la localidad y obtención de información bibliográfica). Además, los diversos insumos se analizaron de acuerdo a los diferentes sistemas del enfoque de Bronfenbrenner.
En primera instancia, la observación directa de la comunidad permitió identificar lo precario de los recursos de esta localidad que vive en carencia económica y social, así como la falta de infraestructura pública y de servicios. Por otra parte, en el entorno directo de la comunidad, se identificó que los vínculos significativos de los pobladores son la familia y los amigos. Es importante notar que la comunidad de Nezahualcóyotl no está conformada por gente oriunda; sino por emigrantes, lo cual crea grupos basados en semejanzas, y a veces grupos poco flexibles y en algunos casos exclusivos. De manera consecuente, en el entorno social se viven sesgos de atención a los diferentes grupos, lo cual genera problemas sociales y de salud (v.gr., alto índice de delincuencia y alcoholismo). Por otro lado, la comunidad no cuenta con escuelas de nivel medio superior en adelante que fungen como ámbitos naturales de encuentro. Esta falta de ámbito natural hace que los jóvenes requieran a utilizar otros sitios de reunión, como las tiendas de abarrotes que facilitan el consumo de drogas legales.
En este sentido, debido a que la localidad en estudio no comparte un mismo origen, se encuentran pocos indicadores de tradiciones compartidas. Esto genera la dificultad para establecer un proceso identitario y de mayor vulnerabilidad para la manifestación y solución de conflictos de carácter social.
El ejercicio del mapeo comunitario bajo un modelo ecológico, permitió identificar las variables faltantes de cohesión social, las cuales pueden generarse y fortalecerse a través de talleres de empoderamiento para generar estrategias de habilitación social, y de desarrollo local y comunitario. Si bien el entender, el entorno de una comunidad y sus lazos sociales dan muestra de un perfil psicosocial, y también permite la identificación de sus necesidades prioritarias para convertirse en una comunidad autogestiva de participación social y apoyo mutuo.
Fotos: Mexico Quarterly Review
María Fernanda Carvallo, Mexico City Community Manager
Community mapping brings people closer to their environment to understand its history, needs, and development. The Department of Social and Developmental Sciences of the Universidad de las Américas of Mexico City developed a community mapping project based on Urie Bronfenbrenner’s ecological systems theory to identify the impact of the environment in the Nezahuacóyotl community. Bronfenbrenner’s theory states that systems and the local environment influence the subject’s change in behavior, which in turn changes the development of the environment. Suzette Aglot conducted a study in San Agustín Atlapulco, located in Nezahualcóyotl, to describe this process between the subject and the community, as well as the factors that make the community vulnerable. According to Aglot, the process of social ecological mapping is a tool of community health analysis. This process attempts to represent the interrelations between conditions and events that take place in the immediate environment of the individual (e.g., home, family and friends), as well as in broad and distant environments (e.g., work, school, hospitals).
To carry out the study, an ethnography was done by identifying the geographic context, observation, and sources of information (e.g., community members, local visits, and obtaining bibliographic information). In addition, the various inputs were analyzed according to the different systems of Bronfenbrenner’s approach.
The observation of the community identified the precariousness of resources in this town living in social and economic deprivation and with limited public infrastructure and services. The study also concluded that family and friends were significant links for the inhabitants. It is important to note that the Nezahualcóyotl community is not made up of native people, but of migrants. This means that groups form based on similarities, but they are sometimes inflexible, and in some cases fully exclusive. The biases in the different groups lead to health and social problems, like high crime rates and alcoholism. The community lacks secondary education schools that would serve the youth as common meeting places. Consequently, the youth use grocery stores as alternative meeting locations, facilitating the consumption of legal drugs.
Since the residents of the community do not share the same origin, there are few indicators of shared traditions. This makes it difficult to establish a self-identification process, and increases vulnerability for the expression and resolution of social conflicts.
The ecological community mapping model has made it possible to identify the missing social cohesion variables, which can now be developed and strengthened through empowerment workshops, in order to produce social adaptation tools and community strategies. Additionally, a community’s environment and its social ties are evidence of a psychosocial profile that identifies the main needs of the community so that it can become self-managed with social participation and mutual support.
Photos: Mexico Quarterly Review