Jorge Bela, Gestor Comunitario de Bogotá
Hay muchas cosas positivas que esperar para el año 2014 en Colombia. Se prevé que el crecimiento económico siga siendo vigoroso, al tiempo que las conversaciones de paz pueden acabar con un conflicto armado que ha durado ya varias décadas. Estas circunstancias presentan un escenario sin precedente para aliviar los problemas de pobreza y desigualdad que sufre el país. Bogotá y Cali, las dos ciudades que seguimos en este blog, tienen iniciativas en marcha que pueden ofrecer soluciones concretas a estos dos problemas. Sin embargo, la incertidumbre es también elevada, tanto a nivel nacional como local. Por un lado, los resultados de las conversaciones son inciertos. Por otro, las elecciones presidenciales que se celebrarán en su primera vuelta en mayo también resultarán en una ralentización de la administración central. Aunque se espera que Juan Manuel Santos ganes la reelección, cualquier cosa puede suceder en la política colombiana, y un cambio en la presidencia puede decelerar aún más el ritmo de las reformas.
En Bogotá hay varias iniciativas en marcha en el sector del transporte público. Los planos para el metro están entrando en la última fase de los estudios geológicos, que estarán terminados a lo largo de 2014, lo que permitiría que en 2015 se adjudicara la construcción de la mega obra. En la superficie se está avanzando en la ampliación del sistema de Transmilenio por una avenida aún por definir. 200 autobuses híbridos empezarán a circular por la Avenida 7ª, sustituyendo a las contaminantes busetas privadas. Si a esto sumamos la reciente inauguración del Transmilenio a Soacha, 2014 puede ver una mejora significativa en los problemas crónicos de transporte público en la capital colombiana, aunque aún serán necesarios ingentes esfuerzos en esta área para llegar a tener el sistema que necesita una ciudad tan grande y extendida.
Por otro lado, el plan para revitalizar el hermosos pero descuidado Centro Histórico continúa avanzando. La administración está trabajando en los protocolos necesarios para llevar a buen puerto estos planes. Para lograrlos se está contando con la ayuda de expertos internacionales de la región, así como de agencias multilaterales. Se espera que su definición termine a lo largo del año, lo que permitiría que las obras de mejora se completaran a lo largo del 2014.
En diciembre, sin embargo, la oficina del Procurador General de la República ordenó la destitución del Alcalde de Bogotá, Gustavo Petro, por supuestas deficiencias en la transferencia del servicio de basuras de concesionarios privados a la Ciudad. La decisión puede ser recurrida y el Sr. Petro ha asegurado que la combatirá tanto con acciones legales como con movilizaciones populares. El diferendo legal y político en el que está inmersa Bogotá añade un elevado grado de incertidumbre al futuro de las iniciativas actualmente en marcha.
En Cali el alcalde Rodrigo Guerrero goza de considerable apoyo político y popular, lo que trae mayores perspectivas a su plan urbano más ambicioso: el Corredor Verde. Sin embargo, Guerrero está sujeto a la misma limitación de mandatos que el resto de los alcaldes colombianos, y que prohíben la reelección consecutiva. Cuatro años es un plazo demasiado corto para acometer un proyecto de esta envergadura, por lo que se hace imprescindible generar el mayor apoyo posible a la iniciativa como mecanismo para garantizar su continuidad a largo plazo. Con este fin a lo largo del 2014 se dará inicio a proyectos piloto relacionados con el Corredor a los que daremos cumplido seguimiento en este blog.
Finalmente, el 7 Foro Urbano Mundial tendrá lugar en Medellín de 5 al 11 de abril de 2014. Se espera que el Foro atraiga más de 10.000 participantes, incluyendo jefes de estado, alcaldes, gobernadores, académicos, profesionales y representantes del sector público. El Foro ya está atrayendo la atención de los medios de comunicación colombianos. El lema del Foro, Equidad Urbana en el Desarrollo — Ciudades para la Vida, sin duda tendrá una resonancia especial en Colombia. El Foro, y su resonancia internacional, servirán como incentivo y como inspiración para las ciudades de Colombia.
Jorge Bela, Bogotá Community Manager
There is much to look forward in 2014 in Colombia. Economic growth is expected to remain strong, and the decades-old armed conflict could be close to its end if the peace conversations now underway are ultimately successful. These circumstances bring an unprecedented opportunity for the country to tackle poverty and rampant inequality. Bogotá and Cali, the two Colombian cities covered on this platform, are working on major initiatives that could have a significant impact on these fronts. However, uncertainty is also quite high, both at the national and local levels. For one, the results of the peace conversations are far from certain. Furthermore, Presidential elections, to be held in mid-year, imply a slowdown of central government activity for most of the year. Although Juan Manuel Santos is expected to win re-election handily, anything can happen in Colombian politics, and a change at the top would also bring the processes of reform to a temporary halt.
In Bogotá, several major initiatives related to mass transportation are underway. Plans for the subway system are reaching their final stages as geological studies are being undertaken on the proposed path of its first line. The engineering studies should be finished in the course of 2014, which would enable the construction of the system to be formally awarded in 2015. Above ground, the Transmilenio surface is to continue its expansion through a still undefined major avenue, while 200 hybrid buses are scheduled to run on 7th Avenue, replacing aging and highly polluting private mini-buses. Together with last week’s inauguration of the Soacha line, these Transmilenio initiatives would bring significant relief to the perennial transportation woes that plague the capital, although much work remains to be done to bring Bogota’s public transportation system up to the level needed for a city of its size.
The plan to revitalize the beautiful but largely dilapidated historic center also continues to advance. City Hall is in the process of defining the protocols that would allow these plans to come into effect. In order to do so, Bogotá is seeking technical advice from regional experts, as well as from multilateral organizations. The protocols are expected to be finalized well before the end of 2014, allowing for actual work to start in 2015.
In December, however, the Solicitor General’s office ordered the Major of Bogota, Gustavo Petro, to be ousted from the post over alleged mishandling of the garbage service reforms. The decision can be appealed, and Mr. Petro has vowed to fight it, both legally and by mobilizing people in the street. The legal and political battles surrounding Bogotá now leave serious clouds of uncertainty over the future of the projects currently underway.
In Cali, Mayor Rodrigo Guerrero has wide political and popular support, which brings great hope for the city’s most ambitious urban renewal project: the Corredor Verde. Still, Mayor Guerrero is held to the same strict term limits that apply to all mayors in Colombia: four years with no consecutive reelection. Since a project as complex as the Corredor Verde cannot be undertaken in such a short time, it is essential to garner as much support as possible so that future administrations will continue to pursue the project. In order to do so, Cali is planning to launch pilot projects during 2014, to be completed through 2015. We will follow these pilot projects closely and report on them here on URB.im.
And, of course, the 7th World Urban Forum will be held in Medellin on April 5-11. The Forum, which is expected to attract 10,000 participants including heads of state, governors, mayors, academics, professionals, and members of the private sector, is already receiving significant media coverage. This year’s theme is, significantly, Urban Equity in Development — Cities for Life, which is likely to resonate strongly in Colombia. The Forum will without a doubt serve as an incentive and an inspiration for all Colombian cities.